Es común ver cómo las personas, tras un divorcio, incluso la ruptura de una relación amorosa de muchos años, comienza a poner más atención y empeño en su persona, en el cuidado de su salud, su arreglo y hacer cambios notables para los demás.
Sin embargo, ¿deben esperar a no tener una pareja para asignarle importancia al cuidado personal?
La respuesta sin dudarlo es: ¡no!
Incluso, puede que, dentro de los factores para que una relación no progrese, está el ya no encontrar atractiva a la pareja, debido al poco interés en su persona.
¡Ojo! Esto abona, pero no es un factor que deba ser definitivo, claro que a todos nos agrada tener una pareja que cuida de su aspecto.
Entonces ¿qué lleva a que las personas sin importar su orientación sexual se descuiden dentro del matrimonio o la relación?
Existen varias razones:
La comodidad y confianza: Al sentirse cómodos en la relación, pueden relajar su apariencia y hábitos o asignarles poca importancia pues ya sienten “confianza” con su pareja para que los vea desaliñados la mayor parte del tiempo.
Otra razón muy común y creo la más usual es la priorización de la familia: Los padres pueden enfocarse en cuidar a sus hijos y descuidar su propio bienestar.
Incluso, si no hay hijos la persona puede estar enfocando totalmente a proveer para su hogar y sus responsabilidades, esto genera falta de tiempo para atenderse de forma individual su salud integral y su cuidado personal.
Considerar que ya no es necesario verse bien para conquistar a la pareja, o ya no anda en busca de parecerle atractivo o atractiva a nadie más, en este caso el enfoque del cuidado personal está relegado a buscar pareja y no a sentirse bien con uno mismo, al desarrollo y bienestar personal lo cual es un grave error.
Un factor interno pueden ser los cambios físicos naturales: El envejecimiento y los cambios hormonales pueden afectar la apariencia y la energía, pero esto debe ser atendido para superar esta etapa.
Algo que sin duda puede ayudar es la franca comunicación con la pareja y apoyarse de manera mutua para que cada uno siga cuidando su salud y apariencia. Es importante recordar que: El autocuidado es esencial para la salud física y mental.
Una mala apariencia personal puede afectar la autoestima y la confianza.
El cuidado personal puede fortalecer la relación de pareja visto desde muchos aspectos.
¡Recuerda que el amor y respeto por ti mismo es fundamental para una relación saludable y feliz!
¡La forma en que nos cuidamos y proyectamos a otros nuestra persona es la muestra más grande de amor propio, así que no esperes a que tu relación fracase para darte cuenta que te tenías en el abandono!
Hasta la próxima entrega.
¡Saludos cordiales desde el AVERNO!
