Felipe Martínez Chávez
No fue un “baño de agua fría” para PRI y PAN la salida del PRD en la alianza Fuerza y Corazón por Tamaulipas. Ya estaba muerto pero insepulto.
Extrañamente el presidente del partido es David Valenzuela Barrios, quien la obtuvo ¿por herencia? a la muerte de su padre, David Valenzuela Arroyo, ocurrida en febrero del 2022.
La madre, Leticia Barrios Chavero, es regidora -de minoría- en el ayuntamiento de Altamira. El muchacho lo fue en el gobierno anterior.
En 2021, todavía en vida, el padre colocó a su cachorro en el primer lugar de la plurinominal rumbo al Congreso del Estado, pero el destino “quiso” que solo cosecharan el 1.0 por ciento de la votación cuando necesitaban el tres. No tienen diputados y les negaron el subsidio oficial.
Lo que sí no es de extrañar es que, al ir solos, en el número uno de las diputaciones aparecerá otra vez el heredero, y a lo mejor su madre en segundo lugar. Es el estilo de los amarillos, un nepotismo carroñero insultante.
Menos mal que igual perdieron registro otros como Encuentro Solidario, Fuerza por México, Redes Sociales Progresistas, de lo contrario Tamaulipas estaría viviendo un infierno político.
El joven maravilla le tira a otros “huesitos” que piensa que le pueden dejar una lanilla. Encabeza la lita de Tamaulipas por el Senado, junto a María del Carmen Hernández Paz (ex diputada local), Honoria Mar Vargas y Jorge Sosa Pohl, este cuyos pecados como alcalde de Madero lo llevaron al histórico penal de Andonegui.
Sosa todo lo convierte en dinero. Fue el negociador con el gobierno de Cabeza de Vaca. Alcanzó prerrogativas personales.
Quién sabe cómo él vaya a hacer el muchacho para conseguir financiamiento para las campañas porque, el PRD, se quedó sin crédito. En otros tiempos lo apoyaron “empresarios”, como ese que denunció públicamente el ex candidato a alcalde de Victoria, Guillermo Gómez Vizcaíno, cuando las comadres se pelearon.
Publicó que lo invitaron “a una plática con un empresario que quería apoyar mi campaña, acepté, acudí, y no era ningún empresario, era un enviado del Gobierno del PAN para que entregara el distrito 14 y la posición número uno de la planilla”.
Valenzuela padre y Sosa lo habían vendido con “El Truco” Verástegui, pero él no vio ni pasar los billetes.
Si las personitas que manejan al partido siguen siendo las misma que hace tres años, lo más seguro es que los candidatos reciben el mismo trato y aparezca el mismo “patrocinador”, aunque ahora ofreciendo dólares.
Por Victoria capital, distrito V ya tienen precandidatos: Adriana Gámez Guerrero, Lidia LUNA MÉNDEZ, Armando Estrada Cantú y Rafael Rodríguez Segura (marido de María del Carmen, de la lista por el Senado).
Bueno, tienen en los ocho distritos, donde David Armando repite en el Sexto, y Honoria en el Octavo.
Aquellos que se dejen engatuzar por las alcaldías correrán con la misma suerte que Guillermo Gómez. Del CEN prometieron mandarle 18 mil pesillos en dos pagos como financiamiento de la campaña. Nunca le llegaron.
Les van a pedir la primera regiduría para meter a su gente. En caso de cosechar el tres por ciento de los votos, pueden quedarse con un asiento de representación proporcional.
Dejemos el tema. No creo que valga la pena dedicarle más tinta. Con seguridad ahora sí se acabará, para siempre, este partido que nació con buena estrella pero lo agotaron sus jefes por tanta corrupción. Hizo bien López Obrador en mandar por un tubo a Los Chuchos, de lo contario nunca habría llegado a la Presidencia.
Tema aparte, que otra vez Don Jorge Espino Ascanio, todavía Auditor Superior, fue amparado (provisional) para no entregar el changarro al nuevo titular designado por los diputados. Quiere el poder hasta el último minuto del 9 de febrero del 2024, en que se cumplen los 7 años por los que fue nombrado.
A saber, los legisladores de la Comisión de Auditoría que preside Humberto Prieto Herrera, no quieren que se vaya, no lo quieren correr, solo que empiece a desempolvar los expedientes para la entrega recepción. Seguirá cobrando hasta febrero.
El chistecito se le atribuye a la jueza Rosa María Cortés Torres, de quien se dice acaba de llegar a ciudad Victoria con malos antecedentes.
Ya veremos. Lo único seguro es que Jorge se va y no podrá dejar a “encargados” a incondicionados como Cesáreo Esparza Ham, Ubaldo Guzmán Acuña y Teresa Moreno González, de su confianza.
En lugar de disfrutar las fiestas decembrinas con sus nietos, Don Jorge sigue buscando broncas.
Antes de irnos, en apariencia las precampañas morenistas bajaron de intensidad en el periodo de vacaciones del sector oficial, pero ahí siguen. El 4 de enero se publicará la lista de diputados federales sin olvidar la segunda senaduría de varoncito.
El 5 de febrero sabremos los nombres de los candidatos a alcaldes y el 12 de febrero diputados locales. Muy pendientes.
