Alfredo Guevara
Contra todo lo que se llegó a pensar, finalmente fueron incidentes menores los que se registraron a lo largo de la jornada electoral.
Para no alentar ni restar posibilidades de triunfo en lo particular a nadie, optaremos por darle oportunidad al INE como al Ietam que den a conocer los resultados preliminares.
¿Qué podemos resaltar de esta elección concurrente? En principio destacar la amplia participación de los funcionarios de casilla, que, desde principio a fin, supieron soportar las elevadas temperaturas y uno que otro desesperado que ejerció su voto.
Reprobar a los que finalmente se arrepintieron por diferentes motivos, dejando al garete la integración de las mesas directivas de casilla, los que desde un principio debieron hacerse a un lado y dar oportunidad a otros.
Y es que uno de los principales problemas fue la integración de las mesas directivas de casilla, por retraso de sus integrantes, ausentismo y otros factores que no incidieron afortunadamente en el porcentaje de la votación. Aunque si las casillas electorales se hubieran integrado a la hora que debieron, los niveles de votación pudieron ser mayores.
Los resultados con carácter preliminar se darán a conocer a través del PREP, aunque habría que esperar a las sesiones de cómputo, programadas para el miércoles, oficializar los resultados y proceder a la entrega de la constancia de mayoría a quien obtenga la mayor cantidad de votos.
Con excepción de la integración de las mesas directivas de casilla, el trabajo de preparación, organización y desarrollo de la elección federal – local, se cumplió por parte del INE como del Instituto Electoral de Tamaulipas.
Los representantes de los partidos políticos se mostraron a la altura y de una u otra forma, aportaron lo que les correspondió para el desarrollo de una elección ordenada.
¿Qué viene? sin duda los recursos de inconformidad que presentarán los partidos políticos que no quedaron conformes con el resultado de la contienda.
Es decir, trabajo para los magistrados del Tribunal Electoral del Estado de Tamaulipas, invalidando el resultado de la elección, la entrega de la constancia de mayoría y otros argumentos. A diferencia de elecciones anteriores, no se escuchó la compra de votos, aunque no se duda que pudo existir.
En síntesis, fue una jornada –al menos hasta la hora de redacción de la presente– tranquila, con incidentes menores que, por ende, no incidieron en el resultado del proceso. En fin.
