Alfredo Guevara.-
Como novias de rancho; vestidos y alborotados, se quedaron los legisladores locales.
El desplante que les hiciera RAÚL RAMÍREZ CASTAÑEDA, titular de la Fiscalía Especializada para el Combate a la Corrupción, les debe servir de experiencia.
Y aunque hubiera ido, la realidad de las cosas es que el Fiscal no ahondará en la información del estado en que se encuentran las 45 denuncias que supuestamente investiga.
Dirá con toda seguridad, el lunes a las 17:00 que nuevamente ha sido citado, que se violaría del debido proceso y por tanto, estará en condiciones de hablar por encimita de cada caso.
A la misma disposición se encuentra la titular de la Contraloría, NORMA ANGÉLICA PEDRAZA MELO, quien por el debido proceso, tampoco puede ahondar y dar a conocer, entre otras cosas, qué ex funcionarios públicos están involucrados en los procedimientos administrativos instaurados.
La inasistencia de RAMÍREZ CASTAÑEDA era un hecho.
Los mismos comunicadores ni deseos tenían de ir a la sede del Congreso local, porque de antemano se sabía que no iría a Comisiones legislativas.
Se pitorreó de los legisladores locales.
El argumento del Fiscal fue que con anterioridad había contraído compromisos y que por cuestiones de la misma agenda de trabajo, no estaba en condiciones de acudir.
Pese a ello y para que se viera la voluntad y disposición, aceptaría ir cualquier otro día de la semana.
Quizá por ello se fijó el próximo lunes a las 17:00 horas.
Y los convenció con tanta facilidad, que los legisladores se sintieron correspondidos.
Desde luego que RAMÍREZ CASTAÑEDA dispondrá de los días de “puente”, para empaparse de lo que simple y sencillamente dirá, sin salirse del formato que utilizará.
La Fiscalía Especializada para el Combate a la Corrupción es una institución que no se duda que trabaje, pero que no ha dado resultados.
Su titular es el mismo que armó toda una estrategia contra el ahora gobernador, alcaldes y servidores públicos.
El que ocasionó que, en algunos casos, tuvieran que irse del Estado al interior del país o el extranjero, para no ser detenidos y encarcelados al calor de la pasada elección de gobernador.
Muchos de los legisladores escucharon hablar de él, pero ni siquiera lo conocen en persona.
La misma presidenta de la Junta de Coordinación Política, ÚRSULA PATRICIA SALAZAR, fue una de las víctimas. ¿O ya se le olvidó? En fin.
