Desde jefes de departamento, subdirectores, directores de áreas, directores generales, subsecretarios y secretarios de la administración estatal, serán evaluados.
Y no precisamente por el desempeño que han tenido en este gobierno, sino más bien por el perfil profesional que tienen y el cargo que ostentan en la administración estatal.
Medir el desempeño, sentaría las bases para dar una sacudida a nivel de secretarios y darle las gracias a más de uno, incluso, subsecretarios, directores generales y directores de área que todavía es fecha, no saben trabajar en el servicio público.
El anuncio del titular de la Secretaría de Administración JESÚS LAVÍN VERÁSTEGUI, al adelantar la revisión de perfiles académicos con el puesto que ostentan, de manera conjunta con la Contralora NORMA ANGÉLICA PEDRAZA MELO.
Y es cierto, en la administración estatal podría haber perfiles académicos que no deberían estar al frente de alguna secretaría, como sucedió en el pasado y se había convertido en una especie de vicio.
Por citar un ejemplo, había un contador y no un ingeniero agrónomo que estuvo al frente de una dependencia relacionada con la agricultura y la ganadería y que, por el simple hecho de ser ganadero, tenía conocimiento, pero no el perfil.
Otro lo es de un arquitecto, que permaneció todo el anterior sexenio en una dependencia relacionada con el agua, en la que, si bien no se discute su capacidad y experiencia, el perfil bien pudo haber sido una persona con carrera en ingeniería ambiental, hidrológica o bien, hidráulica.
Es el caso que se tendrá que analizar entre los casi 60 jefes de departamento, subdirectores, directores de áreas, directores generales, subsecretarios y secretarios de la administración estatal.
Hasta donde sabemos, se ha percibido que alguien que ocupa un cargo se encuentra muy ajeno a lo que hace e incluso que tiene una profesión, pero no tiene nada que ver con la jefatura o dirección que ocupa.
LAVÍN VERÁSTEGUI y PEDRAZA MELO son dos servidores públicos que saben identificar en donde las cosas no están funcionando bien o mínimo, como debieran ser.
La intención del Secretario de Administración desde luego que es buena, pero además del perfil, nada malo tendría que se hiciera una evaluación del desempleo de esos perfiles para medir el resultado de su encomienda.
Es obvio que varios quedarían reprobados. En fin.