Claudia Vázquez Andrade.-
Los diputados de la bancada de Morena en el Congreso del Estado brincan en una patita, pues están a punto de lograr la mayoría calificada, porque el desencuentro que se está dando entre los mismos panistas, les dará, de entrada una legisladora más a sus filas.
Resulta que la panista Nora Gómez González, denunció que falsificaron su firma en la presentación de un recurso de defensa de derechos políticos electorales del ciudadano, promovido por la bancada de su partido ante el Tribunal Electoral.
La tampiqueña fue más allá del reclamo a Félix El Moyo García Aguiar y al dirigente estatal del partido, Luis René El Cachorro Cantú Galván, pues solicitó formalmente la intervención de la Fiscalía General de Justicia para dar con el responsable y proceder penalmente en su contra.
El punto es que Gómez González, podría terminar con sus ex compañeras de partido, o sea, declarándose independiente o sin partido, y por ende, sumándose a los trabajos e iniciativas de Morena, con lo cual sumarían 23 legisladores afines.
Queda claro que ni el Moyo ni el Cachorro, han logrado unificar a su bancada, y por el contrario, solo han provocado desencantos e inconformidades de sus pares, y la verdad sea dicha, atreverse a falsificar una firma, fue un exceso, además de un delito.
Habrá que ver hasta donde actúa la Fiscalía del Estado en este caso, porque la acusación tendrá que alcanzar a alguno de los dos diputados que son muy cercanos al ex gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, y sin bien es cierto, en este momento gozan de fuero, solo será cuestión de tiempo para que sean simples mortales y respondan a cualquier requerimiento de la ley, eso pensando que fueran llamados a cuentas.
Por lo pronto, este desencuentro debería alertar a los jerarcas panistas, e incluso ponerlos nerviosos, porque un nuevo escurrimiento hacia Morena, podría ser la diferencia.
Es decir; cambiar el panorama y hasta la vida de los que se fueron, incluido el ex gobernador.
LA ÚLTIMA
Una vez más, el Auditor Superior, Jorge Espino Ascanio ridiculizó al poder legislativo de la entidad al comparecer ante la comisión sin los 42 expedientes que le requerían.
El auditor de nueva cuenta desafío a los diputados que lo emplazaron para que entregara los documentos de las 42 cuentas públicas aprobadas vía fastrak, con la advertencia de sancionarlo si no cumplía la petición.
Y pues con todo y la advertencia, Espino se presentó con las manos vacías y los mismos argumentos para no hacer la entrega de las carpetas.
Queda claro que el Auditor no está dispuesto a ser subordinado de los legisladores, y eso está claro con todos los desplantes hechos.
Está reunión fue una repetición de las anteriores, mismos argumentos y mismas advertencias con mismos resultados y mismas burlas.
Tal parece, que esta telenovela o serie va para largo por lo pronto los primeros cinco episodios fueron más de lo mismo.
El único agregado es que los diputados locales le hicieron un apercibimiento.
En pocas palabras, a Jorge Espino Ascanio le han hecho lo que el aire a Juárez, y todo hace indicar que el todo poderoso del auditor continuará haciendo su santa voluntad.
[email protected]