noviembre 21, 2024
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Rogelio Rodríguez Mendoza

Traición en el PAN

septiembre 16, 2024 | 141 vistas

Todo un escándalo político ha desatado el engaño, o traición, por parte del diputado y secretario de finanzas del Comité Directivo Estatal del PAN, Raúl Rodrigo Pérez Luévano, al votar a favor de la reforma judicial, a pesar de que previamente a la sesión extraordinaria del Pleno Legislativo, del pasado jueves, había expresado públicamente su rechazo a la iniciativa.

El escándalo es todavía mayor, porque Pérez Luévano es el suplente del presidente estatal del PAN, Luis René, “El Cachorro”, Cantú Galván, quien a su vez representa abiertamente los intereses del exgobernador, Francisco García Cabeza de Vaca.

El voto del reynosense, y de la también panista, Leticia Sánchez Guillermo, permitieron que Morena aprobara, sobradamente, la minuta proyecto de decreto de reforma constitucional, para que Tamaulipas se convirtiera en el estado 17 del país en dar su respaldo a la reforma judicial.

Fueron contabilizados 20 votos a favor, diez en contra y una abstención, este último de la también legisladora del PAN, Nora Gómez.

Lo peor de todo es que, previo al inicio de la mañanera sesión extraordinaria del jueves, Pérez Luevano llegó al plantón que tenían, frente al acceso del edificio sede del Congreso, decenas de trabajadores del Poder Judicial Federal, que rechazaban la reforma.

En un video que circuló en redes sociales, se le ve hablando enfático y enérgico con los manifestantes. Les expresó el respaldo a su movimiento, y les garantizó que votaría en contra de la reforma judicial.

Sin embargo, minutos después, ya en el Pleno, para sorpresa de propios y extraños, hizo todo lo contrario.

¿Qué le hizo cambiar de parecer? Esa es la pregunta que muchos se hacen en el PAN y también en los pasillos del Congreso del Estado.

Seguramente con el paso de los días se sabrá qué recibió Pérez Luevano, su familia, o alguien más en el extranjero, a cambio del voto, pero mientras tanto la principal interrogante es si será, o no, expulsado del partido.

Si el diputado por Reynosa sigue en el partido, sin consecuencia alguna, se alimentará la versión acerca de que la orden del voto a favor pudo haber salido desde Texas que, aunque a los ojos de muchos pareciera una barbaridad, no sería algo imposible.

Abona a esa especulación la versión que circula también de que el coordinador de la bancada, Félix, “El Moyo”, García Aguiar, llegó deliberadamente tarde a la plenaria para no alcanzar a votar, argumentando que no lo dejaron entrar.

Del voto traidor de Sánchez Guillermo nadie se sorprende, porque la matamorense es una experta en las artes del “chapulineo”. Desde que llegó al Congreso del Estado (esta es su segunda legislatura) ha brincado de Morena hacia el PAN y viceversa, en varias ocasiones.

Entonces, es “normal” que Doña Lety haya palomeado la reforma judicial.

Para justificar su voto a favor, la legisladora argumenta que lo hizo porque la dirigencia del PAN, representada por “El Cachorro”, Cantú Galván, le negó la primera posición en las candidaturas para regidores en el municipio de Matamoros, a pesar de que se lo habían prometido.

La pregunta es: ¿porque se esperó tanto tiempo para cobrar venganza? Esas decisiones de las candidaturas se tomaron allá por marzo o abril, y desde entonces tuvo muchas oportunidades de desquitarse del desplante, sin que se sepa que lo haya hecho porque siguió siendo una férrea defensora de las causas blanquiazules.

Bajo ese razonamiento, como que su versión para explicar el voto en favor de la reforma judicial no resulta muy creíble.

 

EL RESTO

A propósito, no se sabe si por con candidez, desconocimiento de la ley del Congreso, o desesperación, el diputado Pérez Luevano solicitó a la Diputación Permanente, el pasado domingo, que su voto sobre la reforma judicial fuera modificado, ¡para que fuera en contra y no a favor!

Lógicamente su solicitud es complementa improcedente.

La pregunta es: ¿Y los asesores del PAN?

ASÍ ANDAN LAS COSAS.

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