abril 28, 2025
Publicidad

Vivir con el agua hasta el cuello

abril 28, 2025 | 1 vistas

Solo quien ha vivido una inundación en carne propia puede entender el sufrimiento que significa ver cómo se destruye el patrimonio que con esfuerzo se consigue a lo largo de los años.

En los noventas vivíamos en la colonia Miguel Hidalgo, en Ciudad Madero y cada año, en la temporada de lluvias el agua subía, en el mejor de los casos, hasta medio metro adentro de las casas y en todas ellas había muros improvisados que solo servían de contención para las primeras aguas.

En nuestra casa, mi abuelo colocaba costales con arena en las puertas cuando la lluvia se prolongaba varias horas, parecía una trinchera militar.

Algunas veces tuvimos que cambiar colchones y tirar muebles que no habíamos podido salvar de la inundación. Cuando daba tiempo levantábamos lo más alto posible las camas y los muebles más preciados de la casa, con pedazos de block.

Para los niños era divertido pues literalmente se podía nadar en el patio de la casa, claro, con el inminente contagio de infecciones en la piel por el agua rancia estancada.

En mi cuadra, Cheti, el hijo de doña Nachita, hacía negocio trayendo tortillas y cualquier tipo de mandado. Se paseaba en una vieja hielera, la cual usaba como balsa para ir de un lado a otro de la inundación. Cobraba tres pesos por cada mandado y a los viejitos se los dejaba gratis.

Cada año escuchaba a mis padres y a mis abuelos quejarse del abandono del gobierno. “Estos cabrones solo vienen cuando ocupan el voto”, decía mi abuela mientras dirigía el desalojo de los pocos muebles que quedaban de las anteriores inundaciones.

Todo lo anterior me hace pensar en las que están pasando mis hermanos de Reynosa, quienes han tenido que esperar semanas sin un lugar seguro donde estar.

Ayer llegaron los primeros apoyos y vaya que son bien recibidos, pues como dije, solo los que han perdido todo, saben cuánto pesa. Enhorabuena y que estas entregas se hagan lo mejor posible para que todos los que perdieron su patrimonio puedan recuperar, aunque sea un poco de su tranquilidad.

A diferencia de los tiempos de mi adolescencia en la Miguel Hidalgo, el Gobierno del Estado, la Federación y hasta el municipal respondieron a la emergencia con apoyos inmediatos. Ayer el Gobernador encabezó la entrega de recursos enviados por la presidenta Claudia Sheinbaum a las familias de Reynosa.

Es cierto que la obligación del gobierno es atender este tipo de situaciones, pero como le digo, para quienes están en medio del problema, lo más importante es poder recuperar, aunque sea un poco de lo perdido, volver a tener un colchón seco donde dormir y un comedor donde sentarse a comer con la familia.

EL PERSONAJE

Ayer el Secretario de Seguridad habló sobre el incidente con el delegado del IMSS, a quien elementos de la Guardia Estatal detuvieron con una bolsa de dinero en efectivo y un arma.

Le preguntaron al Secretario sobre el estatus de los policías, a quienes por lo que se ve, les quieren cargar toda la culpa por el mal rato que le hicieron pasar al delegado, a lo que el titular de Seguridad respondió que los dos elementos que están siendo investigados se encuentran laborando de manera normal.

El general también aseguró que los elementos no plantaron el dinero y el arma, como se trató de hacer creer a la opinión pública. Tampoco actuaron por su cuenta, atendieron un reporte sobre un vehículo sospechoso con las características de la camioneta del funcionario federal.

De la investigación no se sabe mucho, pues como está en curso la Fiscalía prefiere mantener el caso reservado a la opinión para no violentar el debido proceso, es la regla.

Extraoficialmente se sabe que la denuncia, al parecer anónima, fue por una supuesta venganza contra el funcionario del IMSS, a quien, por cierto, no le tienen mucha estima porque aseguran que llegó con reglas y disciplina militar. Seguramente afectó intereses al interior.

POSDATA

Y para el AFTER de las vacaciones, el gobierno programó un mega puente de jueves a lunes ¡México mágico!

Comentarios