José Inés Figueroa Vitela.-
Desde que la oportunidad de gobernar la convirtieron en ejercicio
delincuencial, violencia, saqueo y persecución, el PAN dejó de ser opción
electoral en Tamaulipas.
En el aquí y ahora, del plano político nacional, MARCELO EBRARD
CASAUBÓN, si no reacciona pronto, se esfumará en calidad de quimera,
por no asumir el resultado de esa suerte de proceso interno, del que
conoció y aceptó las reglas, pero no las respetó cuando se vio perdido.
Hay quienes se apuran a ubicarlo participando bajo otras siglas, lo
que no sería extraño y en todo caso confirmaría las sospechas sobre sus
limitaciones: seguirá sin entender que el liderazgo es uno y es el que mueve
el horizonte electoral mediato.
Son lecciones gratuitas sobre las que varios del vecindario deberían
estar tomando nota.
MARCELO EBRARD con Movimiento Ciudadano -como lo dibujan
algunos-, en uno de esos escenarios terciados -como los pases de fantasía
de la selección nacional en los mundiales de fut-, podría desplazar al
prianismo de la primera minoría, más por los antecedentes que manchan al
frente opositor, que por alguna consecuencia de su Movimiento de origen.
Pero no van a la competencia contra “la mona de los cerillos”.
Vamos a ponernos “elucubrones” y bordemos sobre un escenario que
seguramente no va a pasar, en la elección superior de Tamaulipas -Senado-
, pero es muestra de lo que puede suceder, incluso con otros personajes de
similares resortes.
¿Y si Morena postula al exgobernador EUGENIO HERNÁNDEZ
FLORES y por separado -fuera de coalición- el Partido Verde Ecologista a
AMÉRICO VILLARREAL SANTIAGO alguien dudaría que hicieran el uno-
dos en el saldo electoral de junio del 24?
No es la única fórmula que en el Estado compagina de manera tan
sólida como para anular las expectativas de cualquier propuesta de las
oposiciones.
Menos aún en los escenarios planteados, donde el PRI endosa los
buenos recuerdos que alguien pudiera tener del pasado, sometido cómo
está, al desaseado liderazgo nacional de ALITO MORENO y las hieles que
provoca la sola mención del mayorazgo pan-cabecista.
Hoy las inercias que favorecen al Movimiento de Regeneración
Nacional son intrínsecamente contrarias al desprecio electoral provocado
por el PRIAN solidificado, como se presenta.
De acuerdo al reciente trabajo publicado de Consulta Mitofsky, el 70.3
por ciento de los victorenses está de acuerdo en la forma cómo está
gobernando el Presidente AMLO, el 57.8 respecto del Gobernador AVA.
Con todo y eso, Morena, con el 35.5 por ciento, dobletea y más la
intención del voto sobre su más cercano competidor, así como el alcalde en
funciones mantiene una amplia ventaja para ser nominado a la reelección,
respecto a otros aspirantes de su partido.
Los intentos desesperados del pancabecismo, por entrar a la
competencia electoral, ya brincaron el tema de las noticias falsas, que no
les dio resultado y se encuentran ahora concentrados en el manoseo de las
estructuras institucionales.
Hay quienes ven, atrás de la manifestación magisterial convocada por
el acosador de pseudomaestras -jóvenes ajenas a la vocación e instrucción
normalista a quienes ha repartido plazas de “aviadoras”-, la mano del
exgobernador de triste memoria.
Como parte importante de la sociedad, el gremio magisterial también
está dominantemente compuesto por simpatizantes del Presidente
ANDRÉS MANUELL LÓPEZ OBRADOR y su Movimiento de Regeneración
Nacional.
Fabricar un conflicto, en base a mentiras, como el decir que no hay
diálogo, o que no se atiende la problemática laboral, buscaría generar un
malestar en contra del gobierno, para ponerlo a disposición del
exgobernador y su banda delincuencial.
Una trama que más temprano que tarde quedará evidenciada a los
ojos de los maestros, cuando los promotores pagarán caro su osadía; les
saldrá el tiro por la culata, dicen en el barrio.
Sí, es muy padre la tertulia, el baile, el vino, la fogata, pero la resaca
del verse usados y dejar secuelas en los educandos que han abandonado al
garete, pronto les alcanzará.
Veremos.