¿Y EL ACUEDUCTO?.- Prácticamente se fue el año y nadie sabe nadie supo cuál será el destino del proyecto de construcción de la segunda línea del acueducto, “Guadalupe Victoria”.
Este viernes, el Congreso local bajará el telón legislativo para cerrar el periodo ordinario de sesiones y no se etiquetarán recursos para la magna obra que vendría a acabar con la pesadilla veraniega que enfrentamos los victorenses, cada año, cuando el agua no llega a las tomas domiciliarias.
La viabilidad y necesidad urgente de la segunda línea del acueducto es una obviedad. Los tres órdenes de gobierno, además de los expertos, coinciden en que la obra debe ser una prioridad para el 2024.
Se requiere por dos razones: una, porque permitirá traer a la ciudad más agua de la presa “Vicente Guerrero”; y dos, porque el actual acueducto ya está obsoleto y en cualquier momento puede colapsar por completo.
No obstante, insisto, ni en el presupuesto de egresos de la federación ni en el del estado, se hicieron asignaciones presupuestales.
Lo que sí es un hecho es que, ¡oootra vez!!! el tema será bandera partidista en las campañas electorales que se avecinan. Unos lo usarán para volver a endulzarnos el oído con la promesa de que “ahora sí, el año que entra se inicia la obra”, y otros para reclamarle a los gobiernos su promesa incumplida.
En medio de esa “guerra” mediática estaremos los ciudadanos, quienes padecemos el terrible desabasto del agua.
POLÉMICA EN PUERTA.- La autoridad estatal tendrá que trabajar muy duro para convencer a los ciudadanos sobre la necesidad de pagar una cuota por transitar la carretera Rumbo Nuevo.
Sobre todo, después de que el vocero de seguridad, Jorge Cuéllar, salió el miércoles a revelar un dato desconocido: que todos, vehículos ligeros y pesados, deberán pagar por el uso de esa vía.
El dato no es menor porque mucho se había venido insistiendo en que el pago solo lo harían los vehículos de carga pesada, cuando la realidad es que el cobro aplicara para todos.
Obviamente los más afectados son los habitantes de los municipios del altiplano, principalmente Jaumave y Tula, por ser los usuarios recurrentes de esa carretera.
Es cierto: la Rumbo Nuevo, como casi todas las carreteras del estado, presenta daños severos y por lo tanto requiere mantenimiento urgente.
Sin embargo, una cosa es privatizar una carretera ya construida y otra muy diferente hacerlo con una nueva.
Los defensores del proyecto dirán que quienes no quieran pagar tendrán la alternativa de la vieja carretera, lo cual es cierto, salvo por el hecho de que transitarla implica el doble de tiempo y es mucho más peligrosa que aquella.
Como quiera que sea, ese proyecto será un tema muy polémico conforme se acerquen las fechas.
MAGISTRADO CANDIDATO.- Al que le siguen lloviendo criticas es al magistrado regional del Supremo Tribunal de Justicia, Andrés González Galván, por esa necedad de combinar su tarea de impartidor de justicia con la de aspirante político.
Como se sabe, el juzgador de segunda instancia lleva meses en una abierta tarea proselitista. Tiene incluso una página en redes sociales, donde difunde desde el café con los amigos hasta una reunión vecinal.
Aunque no lo dice abiertamente, pero el muchacho trabaja con miras a lograr una candidatura a una diputación local, lo cual no tendría nada de malo siempre y cuando dejara primero su actual encargo como magistrado.
Sería interesante saber hasta dónde podría estar rebasando, don Andrés, los limites que le impone la Constitución y la ley, por su carácter de servidor público.
¿Qué dicen los expertos? y ¿Qué dicen los árbitros electorales?
ASI ANDAN LAS COSAS.