En los días de iniciado el movimiento y la suspensión de clases, el representante del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación en Tamaulipas, JORGE MIGUEL COTA se ha mantenido al margen
De hecho, ni siquiera se asoma desde que inició el plantón frente a las oficinas de la Secretaría de Educación y menos, ahora que los maestros lo extendieron a la plaza que se ubica, frente a palacio de gobierno.
Se supone que la función de MIGUEL COTA, es para intervenir o mediar incluso, en un conflicto como el que se vive entre el Gobierno, la SET y la Sección 30.
Sin embargo, se mantiene ausente, ajeno y al margen de la lucha de los maestros.
Pareciera que el representante del SNTE en Tamaulipas, no está de acuerdo y mucho menos avala el movimiento iniciado el cinco de septiembre, como tampoco la movilización y plantón en Gobierno.
De otra forma, por lo menos se viera a COTA en esta serie de acciones, como se le observó en otra serie de eventos oficiales, en los que declaró y opinó sobre el entorno educativo.
Quizá por ello, el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA pidió al Comité Ejecutivo Nacional del SNTE intervenir en el conflicto, originado por la Sección 30 en Tamaulipas.
Citó que la solicitud de salida de la titular de la SET, va más allá de los 22 puntos planteados.
Y es que, no se trata de una medición de fuerzas, sino de encontrarle solución a una problemática, donde la mayor parte de los afectados, son los alumnos de educación básica.
Desde luego que el SNTE está en condiciones de intervenir a través del Consejo Nacional, de acuerdo a los estatutos internos.
Por lo pronto, ARNULFO RODRÍGUEZ TREVIÑO adelantó que el plantón se mantendrá frente a palacio de gobierno.
Diremos que la llegada de maestros de varios municipios, ocasionó el acaparamiento de las calles en lo que comprende la zona centro de la ciudad, donde los espacios para estacionarse, fueron pocos.
Nos preguntaban ¿quién o quiénes están auspiciando los gastos de todos los maestros que vienen de diferentes municipios a Ciudad Victoria?
Y es que, viajar en autobús o auto particular, representa un gasto.
El consumo de alimentos y, en algunos casos, el hospedaje, también.
De la exigencia plasmada en 22 puntos por la Sección 30 de maestros, pasó a un movimiento que ya cumplió una semana, en la que si bien no ha tenido respuesta, por lo menos ha sido divertida para el magisterio, que ha bailado, gritado, comido carnita asada al son de grupos musicales y demás platillos. En fin.
