Diego López Bernal.-
El adjetivo colocado en el título de esta puesta en escena es usado para señalar productos o empresas que no cumplen a cabalidad con lo que ofertan; ejemplos hay muchos y se retoma el vocablo esta semana ante los casos detectados de meningitis en clínicas de belleza estética, en Matamoros, que han cobrado la vida de al menos una persona. Así, los medios echan mano (echamos, dijo el otro) de este elemento para señalar las “cosas patito”.
Este adjetivo molesta a muchos empresarios. Ahí tienen a JOSÉ JOEL GÓMEZ VELASCO, el mero presidente de la Canaco en la fronteriza ciudad de Rigo Tovar, quien salió al paso de este tipo de señalamientos para decir que allá abundan los centros médicos que cumplen con todas las de la ley y en ellos laboran médicos reconocidos, pero que lamentablemente pueden resultar afectados en su reputación… Y todo porque fueron detectadas varias “clínicas patito”. En eso estamos de acuerdo y damos fe, cuando menos de la calidad del doctor ARTURO GARZA y su equipo, héroes de mil batallas para familias incompletas.
Por eso siempre hemos pensado que no se vale generalizar. No porque dos o tres cirujanos plásticos la hayan regado gacho en Matamoros ya se va a desacreditar a todos; lo mismo sucede en otros ámbitos, sobre todo en el que ocupa más la atención de este simple espectador: el Foro Político. A ver, ¿todos las presidencias municipales de Tamaulipas pueden ser consideradas “gobiernos patito”? ¿Verdad que no? Ahí tienen como ejemplo a las de Tampico y Madero, con alcaldes que están por terminar seis años de gestión, y más recientemente a la de Nuevo Laredo, en donde al menos en la percepción están por las nubes en satisfacción ciudadana.
Sin embargo, hay otros gobiernos locales a los que les cae de perlas el calificativo multimencionado. Vamos de norte a sur; mientras en Matamoros la población apoyó por una elección más a su alcalde, los principales indicadores de desarrollo dejan mucho qué desear, algo similar a lo que sucede en Reynosa, en donde los electores decidieron respaldar la continuidad de la exalcaldesa, pero ahora en su hijo. La tónica en ambas urbes es la misma, mucho graznido (de patos) y autoridades electas que, precisamente, se hacen patos, sobre todo a la hora de que estallan los problemas sociales, como la violencia. ¿A poco no?
Ahora bien, ¿será prudente echarle un ojo a la Capital de Tamaulipas? Pues bien, esta semana de caminatas matutinas pudimos constatar que la basura se acumula al igual que los cráteres llamados baches que dejan las lluvias, además de que amplios sectores padecen de alumbrado público deficiente.
El telón sigue arriba aunque muchos apuestan doble contra sencillo que bajará de sopetón para los actuales morenistas que hacen como que chambean en el 17 Hidalgo. ¿Ustedes les aplauden?
