Diego López Bernal.-
Pues se levanta el telón en Tamaulipas de los procesos internos para
elegir a los candidatos a la Presidencia de la República con la visita
relámpago de ADÁN AUGUSTO LÓPEZ, hombre de todas las confianzas y
afinidades del mero mero morenero, es decir, de ANDRÉS MANUEL
LÓPEZ OBRADOR. Sin embargo, cabe recordar que el Presidente prometió
no meter mano en este proceso.
Ahora bien, no se elige aún al candidato, que quede claro. Bien, bien,
se vale reír pues todos sabemos que designar por encuestas al “líder de la
defensa de la Cuarta Transformación” solo es el show que evitará caer en
actos anticipados de campaña y dar concesiones a los rivales de la
oposición, en caso de ser sancionados por las autoridades electorales. Así
es la política mexicana y su acomodaticia democracia partidista.
Ya lo hemos dicho antes, no vemos mal que se adelanten unos
meses en el calendario electoral, siempre y cuando se quiten las máscaras
y sean honestos con el pueblo, con aquellos de quienes el día de mañana
requerirán el voto para ganar la contienda constitucional. Pero eso de pedir
el sufragio no es lo de ahora, lo de hoy es el show interno.
Por eso llama la atención la acelerada agenda de la corcholata
número tres. Recordemos que así los bautizó el presidente AMLO, como
corcholatas, en una alegoría para evitar hablar de destapes, aquello que
estilaba el PRI de antes para decir quién sería el candidato y virtual sucesor
del presidente en turno. Eran otros tiempos en los que la oposición aún no
figuraba.
Sin embargo, esa costumbre de que el presidente en turno, y
solamente él, decidía quién sería el candidato a sucederlo terminó por
romper lo que también se le conoció como la dictadura perfecta y los que en
aquellos años se oponían a esta práctica ahora están en el poder, pero con
nuevos partidos formados por ellos mismos. ¿Qué queremos decir con
esto? Simple, que son los mismos políticos, pero ya bajo otra bandera
partidista, ahora conocida como Morena.
Estas aclaraciones vienen a colación porque el ahora exsecretario de
Gobernación, que nos visita este lunes, es uno de los principales
interesados en que no haya dedazo obradorista. Aunque tiene el visto
bueno del AMLO, muchos aseguran que no es a quien el actual mandatario
nacional quiere para sucederlo. Casi todo mundo dice que esa querencia la
tiene CLAUDIA SHEINBAUM.
DE RAPIDITO, LA GIRA
Pero echemos un vistazo a la gira relámpago de don ADÁN
AUGUSTO, quien no pierde la fe en que Morena sí hará las cosas bien, no
como en el viejo PRI. Se dice que el también tabasqueño estará a primera
hora de este lunes en Nuevo Laredo, a las nueve de la mañana para ser
más precisos; de ahí viaja a Matamoros para tener evento a las tres de la
tarde y en Reynosa terminará la jornada, a las seis y media. ¡Tranquilino!
¿Pero cuál es la prisa?
No crean que es por cuestiones de seguridad pública, porque la
jornada del martes será igual de intensa. Se espera que esté en San
Fernando a las diez de la mañana para después viajar hecho la mocha a
esta Ciudad Victoria, en donde encabezará actos a la una de la tarde;
posteriormente, a las cinco, deberá despachar en El Mante y terminaría su
gira fugaz en Tampico. Nombre, este aspirante puede presumir de ser fiel
seguidor de nuestro equipo de futbol, el Correcaminos.
Hecho está. Nos queda la sensación de que don ADÁN AUGUSTO no
tendrá tantas porras como SHEINBAUM ni EBRARD, pero el ex de la Segob
no puede ser descartado porque en una de esas es el tercero en discordia
que los morenistas requerirán si sale lumbre entre los dos primeros. Por
nuestra parte estaremos atentos para ver si trasciende algo de la visión del
tabasqueño porque eso es lo que nos interesa, ir conociendo desde ahora lo
que ofrecerán para defender y mejorar la Cuarta Transformación.
GOBERNADOR AL MARGEN
A manera de colofón, vale la pena recordar que la indicación para
todos los gobernadores de Morena es no meter las manos en el proceso
interno, y como sabemos de la disciplina férrea que rige a AMÉRICO
VILLARREAL ANAYA, tanto ADÁN AUGUSTO como el resto de las
corcholatas pueden dar por sentado que en Tamaulipas sí habrá piso
parejo, como lo demandan todos. Así lo creemos, pues el Gobernador es
hombre de palabra y fiel a las indicaciones de AMLO. Aplausos.
