La designación, ayer, de Mónica Villarreal Anaya como candidata de Morena a la presidencia municipal de Tampico, es el cierre de la crónica de una candidatura anunciada.
Las primeras señales se dieron a principios del mes de noviembre cuando la regidora morenista rindió su segundo informe de labores, logrando reunir no solo a la clase política de su partido a nivel estatal, sino también a importantes miembros de la comunidad empresarial de Tampico.
A ese evento también asistió el gobernador Américo Villarreal, quien, desde luego, respaldó el trabajo y la persona de quien hoy encabeza el proyecto guinda por la alcaldía porteña.
Durante las semanas posteriores Mónica intensificó su actividad y sus apariciones en público, incluso se corrieron versiones de reuniones que habría sostenido con reconocidos actores políticos de la zona sur, entre ellos la maestra Magda Peraza, quien finalmente decidió ir en fórmula con los candidatos de Acción Nacional.
Como contrincante la hermana del Gobernador tuvo nada menos que a la presidenta de la Junta de Gobierno del Congreso del Estado, Úrsula Salazar Mojica, quien es sobrina del presidente López Obrador.
En ese sentido, lo que se supo ayer que se dio a conocer el resultado de la encuesta es que la competencia entre Úrsula y Mónica fue bastante cerrada, aunque al final Villarreal obtuvo el triunfo.
Esto nos lleva a pensar que la actual diputada local podría ser, si es que lo acepta, candidata por alguno de los distritos de Tampico, en donde tendría que enfrentarse a Pepe Shekaiban o a la propia Magda Peraza.
La designación de Mónica elevó las expectativas en Tampico para Morena, no solo porque se trata del último bastión panista de Tamaulipas, sino por el alto nivel de aceptación que tiene el alcalde Chucho Nader, del cual se habrán de colgar el resto de los candidatos panistas.
Todavía falta ver quién será la candidata o el candidato de Acción Nacional en Tampico, pero desde ahora se puede anticipar una contienda de pronóstico reservado. Se va a poner interesante.
EL PERSONAJE
Muy interesante la denuncia que presentó la regidora Astrid Santoya sobre un cobro que la Comapa de El Mante está realizando a los ciudadanos por el tratamiento de una planta tratadora de aguas residuales.
El detalle es que dicha planta por la cual los ciudadanos tienen que pagar en cada recibo, no está funcionando desde el 2011. Por eso resulta interesante la denuncia y más aún saber en qué se han gastado los recursos obtenidos, porque evidentemente en saneamiento no.
A propósito de El Mante, nos comentan que el delegado especial Mario Llerto ya tiene en agenda una visita a esa ciudad para endulzar el paladar de alguno de los aspirantes de Morena a la alcaldía, todo apunta a que será para el comisionado de Coepris, Alberto Moctezuma.
POSDATA
A partir del viernes el gobierno del estado y sus dependencias entrarán a una veda electoral que les impedirá promocionar las acciones que realizan, pero ojo señores secretarios, no se confundan, la veda es solo para el tema de publicidad, no son vacaciones, tienen que seguir chambeando.
