Aún recuerdo como comenzó todo con la fecha exacta, era un 13 de julio del año 1985, tenía tan solo tres años de edad, no hubo poder humano que lograra despegarme de la televisión aquel día.
Las pistas de los temas en inglés coincidían con las que disfrutaba tanto escuchar en la camioneta de mi padre y eso contribuyó a que tan pequeña me inclinara por este género si de música hablamos.
Este próximo jueves 13 de julio se conmemorará el Día Mundial del Rock y es aquí donde haré referencia al día con el que inicié este relato. Hasta estas fechas recuerdo el color de la videocasetera de mi casa, misma que estaba por debajo de la tele conectada a ella era una Sony betamax modelo SL-T25ME con un casete listo para grabar cada inolvidable momento empezando con una recatada y tímida Madonna el que hasta hoy es el mejor concierto en la historia de la música de todos los tiempos.
Dieciocho horas de transmisión alrededor de todo el mundo, la crema y nata del rock cantando sus mejores temas en el mismo escenario, todos estaban ahí, una lucha de egos que al fin y al cabo cedieron al saber que cada quien tenía los mismos minutos para presentarse, millones de espectadores, 150 países conectados entre sí y lo más importante y lo cual considero como el mayor alcance logrado por el rock, el haber recaudado millones para la lucha contra el hambre en Etiopía y debido a esta enorme repercusión fue que se creó y se conmemora el día del rock, un día como ayer 13 de julio desde 1985, el día que todo el mundo encendió su televisión para ver el Live Aid.
Esta brillante idea fue de Bob Geldof, quien anteriormente ya había realizado un emotivo encuentro con grandes leyendas para navidad y el tan conocido We Are the World a favor de África pero la tercera fue la vencida y fue así como el líder de la banda The Boomtown Rats, tras escuchar la situación del lejano país de Etiopía en un informe de la BBC, hace realidad lo que muchos aún no creen que haya ocurrido e incluso dudan que pueda repetirse. Para esto tengo que resaltar que Geldof fue rechazado por el más importante promotor de rock en aquel entonces de apellido Goldsmith si mal no recuerdo, el día de hoy aplaudimos que no se diera por vencido y el resto ahora vaya que es historia.
No obstante, a pesar del empuje, tanto del organizador como de múltiples e icónicos artistas que se sumaban, por el simple motivo de saber quiénes participarían, era bien sabido que el Rock no tenía esa etiqueta de género solidario, al contrario, si eras cantante de rock, eras el chico malo de la historia, y el único concierto benéfico seguía siendo el de George Harrison en Bangladesh.
Aun así el riesgo se tomó, se agotaron en muy poco tiempo más de 180 mil entradas dando un total de mil 500 millones de espectadores. Sin duda uno de los momentos más esperados fue la actuación de Led Zepellin sorprendió a la audiencia presentándose como Page, Plant y Jones, no como la banda Led Zepellin, pero el motivo, entendido por muchos fue por la ausencia de Bonham, su baterista, mismo que fue sustituido por Tony Thompson y también por Phil Collins. Se esperaba más de esta actuación ya que Robert Plant no se oía tan bien, Page no se encontraba del todo bien, en fin, eran Led Zepellin y tan solo verlos ahí de nuevo era suficiente.
Retomando a Phil Collins digámosle que fue el alma de la fiesta, fue el único en tocar en los dos lugares el mismo día, estuvo en Londres con Sting, termina, se va en una moto al aeropuerto, se sube a un Concorde en donde ensayó los temas de Zepellin y se baja ya en otro continente con ellos.
Y sé que estarán de acuerdo conmigo en que quien se llevó la noche con la mejor presentación fue Queen, con menos de veinte minutos que hasta este día siguen cautivando a quien busca escucharlos en cualquier plataforma actual, la banda pionera en lograr incorporar al público en una canción, gracias a la creación de We Will Rock You, con un Freddy Mercury ya consciente de su enfermedad y del poco tiempo que le quedaba de vida, ahora confirmamos por qué ese día nos daba el plus de su talento en el escenario.
Moraleja: cuando hay voluntad hay manera, los chicos malos del Rock se unieron a favor de una buena causa, así que no juzguemos por las apariencias, ya que, en ocasiones, puede haber una gran esencia tal y como la hubo en esta.
Twitter: @DhenaMansur