Por José Inés Figueroa Vitela.-
No solo el delito, la impunidad, la violencia y el abuso forman parte de la herencia maldita del exgobernador de triste memoria.
Ahora anda tratando, a través de su capataz, imponer la miseria y la ignorancia de manera transexenal.
El Comandante en Jefe de los operativos delincuenciales del pasado sexenio, quien no es otro que el malogrado candidato gubernamental, auto apodado EL TRUKO VERASTEGUI, atendiendo las instrucciones del Patrón del Mal, por estos días anda en un frenético activismo, pretendiendo impedir que la fiesta del arte y la cultura vuelva al pueblo.
Ellos negaron el escaparate de la cultura y el solaz esparcimiento a los tamaulipecos y no soportan que alguien más se lo esté regresando a la sociedad.
Por supuesto, lo anda haciendo en los ayuntamientos que aún se encuentran sometidos al yugo del pan-cabecismo, que cada vez son menos.
Para esta jornada, el lugar donde mejor han acomodado las formas del pasado sexenio, por las añejas cercanías cupulares, ha sido con la alcaldesa de San Fernando, Marbella Ramírez, quien por atender las órdenes del TRUKO, ahora está privando a su pueblo de participar y disfrutar los espectáculos, talleres y exposiciones del Festival Internacional de la Costa del Seno Mexicano, como lo hacen en el resto del Estado,
Pensarán que con eso puedan recuperar algo de la deferencia y confianza de los ciudadanos, que se encargaron de dilapidar con su errática y delincuencial conducción durante el pasado sexenio.
Claro que es una idea descabellada, solo dable en sus estrecheces intelectuales y políticas; los sanfernandenses eventualmente podrán satisfacer sus aspiraciones culturales por otras vías o lugares, pero jamás repetirán el error de regresarle la confianza a sus verdugos.
Lo de la obstrucción para que los eventos del festival programados no se hagan en el municipio, apenas es un botón de muestra de todo lo que, por su mezquindad, sectarismo, envidia, ignorancia y sumisión al mal, han actuado en contra del pueblo.
Marbella, como alcaldesa, lo único que ha recibido es deferencias y muestras de apoyo para los sanfernandenses, de parte del Gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA y en reciprocidad solo ha respondido con sujeción al pasado vergonzante.
Como en el caso del Festival, ha estado obstruyendo y negando los permisos para la construcción del Hospital de PEMEX, que el gobierno de la transformación gestionó al más alto nivel, como fuente de empleos, derrama económica y oferta especializada para la salud en la región.
Otra vez, la mala entraña del TRUKO y la lo displicencia de la alcaldesa, tratando de prolongar las malas artes del pasado, llevándose al pueblo entre las patas.
El dominio ejercido por el exgobernador, su familia y personeros, sobre el PAN estatal, hasta nuestros días, representan el último clavo sobre el ataúd de ese instituto político.
Andaban pregonando que Tampico sería el reducto desde donde seguirían saciando sus apetitos perversos y financiando la compra de conciencias y lealtades en otros lugares y órdenes públicos, más allá de la elección de junio del año entrante.
La separación de los derechos partidistas a la diputada local y dirigente tampiqueña del partido NORA GÓMEZ, el pasado fin de semana, aparece como la confirmación de que los CDV pretenden imponer un personero como candidato a la alcaldía, con la idea de prolongar aquellos saqueos.
En el pecado llevarán la penitencia.
Antes de reclamarle a la lideresa partidista el pago de sus cuotas -pretexto para retirarla de sus derechos-, el acusador dirigente estatal LUIS RENE CANTU debe aclarar al INE y al partido mismo qué hizo con los 80 millones de prerrogativas que le observaron por irregularidades.
Tampoco los tamaulipecos pagaron impuestos al pasado gobierno estatal cuando fueron evidentes los saqueos y despojos de sus titulares, en contra del interés del pueblo.
Con él impresentable ISMAEL como candidato a la reelección en el Senado y otro cabecista de candidato a alcalde de Tampico, ni el escaño de primera minoría y menos el enclave porteño permanecerán en el PAN.
Veremos y diremos.