septiembre 28, 2024
Publicidad
Melitón Guevara Castillo

Kleenex: úsese y tírese

junio 25, 2024 | 150 vistas

Melitón Guevara Castillo

 

Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum son diferentes; en principio está la cuestión de género, luego sus diferencias; el actual Presidente es un zoom polítikon, que busca a como dé lugar el poder y le encanta ejercerlo, es además un pragmático. La Presidenta electa tiene, por otra parte, una formación académica, acostumbrada a planificar y tiene, en su haber, una militancia de años en la izquierda…no fue, como AMLO, priista, perredista y luego padre de Morena.

Es bueno ver las diferencias entre uno y otro por una sencilla razón: uno está gobernando y la otra, en menos que canta un gallo, hará lo mismo. En el contexto hay una percepción: que la continuidad no será con cambio generacional; que AMLO se convertirá en un ente que, en la práctica, seguirá ejerciendo el poder a través de Claudia. Un esquema sucedido en el siglo pasado, con Pascual Ortiz Rubio y Plutarco Elías Calles.

 

GENERAR TRANQUILIDAD

El resultado de las elecciones del 2 de junio creó incertidumbre en el mercado y se intensificó cuando el líder de los diputados aseveró que la reforma judicial va en septiembre. A partir de ahí, la Presidente electa por diversos medios ha buscado tranquilizar a los mercados. Primero, fue señalar que continuará el actual Secretario de Hacienda. En su reunión con AMLO, este sentenció: primero es la justicia y luego los mercados, así que la reforma al Poder Judicial va, porque es decisión del actual Presidente.

El segundo paso para dar tranquilidad política y económica fue dar a conocer a seis miembros de su gabinete, es decir, los adelanta. Y, efectivamente, los nombres de Marcelo Ebrard como de Juan Ramón de la Fuente, entre otros, dan tranquilidad y envían el mensaje que Claudia quiere dar a los mercados: y efectivamente, unos y otros ponderaron los nombres dados a conocer. Con esto, hagan de cuenta que se gana tiempo y se serenan un poco los mercados y la incertidumbre de lo que puede suceder.

 

PASAR EL BALÓN

Cuando uno de los secretarios de AMLO vio todas las batallas o frentes que generaba el Presidente, le recomendó que hiciera lo que Mike Jordán: que, ante la imposibilidad de anotar, atendió la recomendación del entrenador: pasar el balón, es decir, aventarle a otro la papa caliente para mitigar los golpes o la presión. La respuesta de AMLO fue categórica: sí, pero yo no voy a pasar el balón. Y eso fue lo que hizo, aguantó y ordenó, nunca consultó ni pidió asesoría, por eso, poco a poco, quienes iniciaron con él ejerciendo el gobierno fueron hechos a un lado.

A partir de este hecho, fue como se recordó la cuestión del kleenex. De úsese y tírese. Porque así hizo AMLO, con aquellos secretarios o colaboradores que, sin ser morenistas de hueso colorado, llegaron al gabinete y generaron una impresión alentadora a la población, como a los inversionistas. Se fueron Irma Eréndira Sandoval de la Función Pública; Julio Scherer Ibarra deja Consejería Jurídica; Santiago Nieto dejó la Unidad de Inteligencia Financiera; Olga Sánchez Cordero dejó Gobernación; Arturo Herrera salió de la SHCP… y así, por este orden, dejaron el gabinete personajes que dejaron de ser útiles o de plano cometieron un hecho reprochable a los ojos del Presidente.

 

CONSEJOS

Una y otra vez AMLO ha dicho que se va a ir a su rancho, a Palenque; que va a escribir y a leer, incluso, ya avisó que se irá solo, que su esposa Beatriz seguirá en la CDMX y que él vendrá a verla. Sin embargo, los hechos lo desmienten: convertido en un operador nato de la política ha construido un andamiaje que le va a permitir, como quien dice, darle de coscorrones a la Presidenta: ha dicho que no ha recomendado a nadie, pero ahí tienen que Gerardo Noroña ya recuerda el acuerdo inicial de las corcholatas: que los perdedores serían legisladores, coordinadores o estarían en el Gabinete: Y Claudia está cumpliendo.

Ya una vez AMLO le entregó el bastón de mando a Claudia Sheiumban: el del Movimiento de la 4T, es decir, de Morena. En los hechos, tirios y troyanos se dieron cuenta que fue un acto simbólico: ¿Qué sucederá, con la banda presidencial? No cabe la menor duda de que el consejo, el comentario, la reflexión de AMLO va a pesar: en la presidenta y en el gabinete. Así que, por el momento, los primeros nombres dan tranquilidad y serenan a los mercados: ¿será igual al transcurso del ejercicio del poder? Siempre se ha dicho que los primeros de un gabinete, son para cumplir compromisos… que luego, en la primera oportunidad, se van para que lleguen, digamos, los buenos, los del equipo, colaboradores fieles y comprometidos.

 

Comentarios

MÁs Columnas

Más del Autor

Llegué con miedo

Por Melitón Guevara Castillo

Causa y consecuencia

Por Melitón Guevara Castillo

La herencia o legado

Por Melitón Guevara Castillo