LA NEGOCIACIÓN.-Sin duda, excelente el trabajo de negociación de la presidenta Claudia Sheinbaum con su par estadounidense, Donald Trump, cuyo acuerdo más importante es la pausa a la imposición de aranceles a los productos mexicanos.
Sin embargo, ojalá que esta presión política, económica y mediática de Trump lleve a México a darle un giro a su política de seguridad pública para combatir en serio a los grupos criminales que tienen al país sumido en un baño de sangre y de terror.
Sobre todo después de seis años de aquella absurda política de “Abrazos, no balazos”, que empoderó más a la delincuencia organizada.
El Presidente vecino acusa a México de sostener una alianza con los cárteles mexicanos, lo cual es un despropósito, porque una cosa es que haya gobernantes o funcionarios coludidos con las organizaciones criminales, y otra que sea el Estado mexicano el que sostenga esa “alianza”.
Como quiera que sea, insisto, esperemos que esta presión de Estados Unidos lleve al Gobierno mexicano a endurecer su estrategia de seguridad pública en contra de la “narcodelincuencia”.
No debe importar que para ello México tenga que aceptar apoyo, de todo tipo, por parte del país vecino. Es una oportunidad de oro.
Sobre todo porque resulta una obviedad que por sí solo el Gobierno mexicano no ha podido ni podrá pacificar al país.
¿O no cree usted?
MEJOR NADA.- Atizan más el fuego de la desconfianza algunos diputados, cuando salen en defensa del candidato a una magistratura del Tribunal de Disciplina Judicial del Poder Judicial del Estado, Andrés Norberto García Repper Favila.
Resulta que el abogado García Repper fue integrante del Comité Evaluador del Congreso de la Unión para la elección judicial federal, y luego se registró como aspirante a una magistratura en el Poder Judicial tamaulipeco.
Eso no tendría nada de malo, si no fuera porque el hombre está plenamente identificado el partido en el poder, del cual ha sido incluso defensor y representante ante los tribunales electorales, lo cual lo coloca en un conflicto de interés.
Obviamente ambas situaciones han hecho que le “lluevan” críticas.
El asunto es que algunos legisladores con los que comparte filias políticas han salido a defenderlo, argumentando que la Constitución solo limita a quienes hayan ejercido algún cargo partidista, y en el caso de don Andrés Norberto, “solo cobraba con recibo de honorarios”.
Con esa defensa, mejor nada.
LOS APUROS DEL IETAM.-Mientras que el consejero presidente del Ietam, Juan José Ramos Charre, anuncia que “en marzo o abril” solicitará una ampliación presupuestal de 90 millones de pesos para enfrentar los costos de la elección judicial, el presidente de la Junta de Gobierno del Congreso del Estado, Humberto Prieto Herrera, ya le adelantó el “no”.
Al menos eso fue lo que el también coordinador de los diputados de Morena respondió el pasado viernes en su conferencia “Mañanera Legislativa”, a la pregunta de un reportero sobre los apuros del Ietam para sacar adelante la elección de juzgadores locales.
“El dinero no debe ser problema. Con su capacidad, los “magistrados” (sic) del Ietam pueden sacar adelante la elección”, dijo Prieto
La realidad es que la última palabra sobre la ampliación presupuestal al Ietam la tendrán en Palacio de Gobierno, porque en esos temas de dineros el papel de los legisladores es solo aprobar o rechazar lo que les mandan desde el Poder Ejecutivo.
Y si los consejeros electorales justifican y sustentan bien su solicitud de recursos, seguramente les terminarán ampliando la bolsa, aunque quizás no con los 90 millones que estiman pedir.
ASI ANDAN LAS COSAS.