Diego López Bernal
¡Llegamos al 2024! Llegar ya es una ganancia… Ahora continuemos hacia el 2025 y en verdad es un privilegio hacerlo desde las actividades que en verdad nos apasionan, como es esto de andar de mirón en los foros públicos para después dar una repasada a quienes se la ganen, sobre todo aquellos que quieren jugar con la inteligencia de los espectadores.
Ahí tienen por ejemplo a los CABEZA DE VACA. El sábado por la noche sucedió un nuevo evento de inseguridad, muy lamentable porque secuestraron a más de tres decenas de personas, pero al ser inmigrantes de otros países la noticia tomó revuelo incluso a nivel internacional, sobre todo por lo que en anteriores ocasiones ha pasado con extranjeros que cruzan territorio tamaulipeco, con la ilusión de llegar a los Estados Unidos.
Pues bien, la noticia agarró en plena fiesta al ex gobernador y a otros integrantes del clan de los cuernos largos y fue hasta el lunes que usaron sus redes para condenar el secuestro, el cual ocurrió en el que fue su territorio político por más de una década, es decir, en la zona de Reynosa. La verdad, dan risa los mensajes de estos personajes.
Y es que a eso nada más se dedican últimamente FRANCISCO GARCÍA y demás compinches, a rasgarse las vestiduras cuando en los tiempos que la seguridad pública era su responsabilidad sucedían cosas igual o peor de indignantes. ¿Recuerdan alguna? Seguramente sí porque fueron muchos eventos de violencia extrema en los tiempos del cabecismo, como la masacre de Camargo, Tamaulipas. Repasemos la historia de terror.
Se trata del asesinato de 17 inmigrantes en un rancho ubicado entre los municipios de Camargo y Díaz Ordaz, a escasos kilómetros de Reynosa, la tierra del ahora exgobernador pero en ese entonces, es decir, el 22 de enero del 2021, GARCÍA CABEZA DE VACA aún gobernaba la entidad. Lo peor del caso es que fueron elementos estatales quienes mataron y quemaron a los extranjeros, en un caso que retumbó desde Washington hasta Centroamérica. Por eso dan risa las condenas públicas de los interfectos, que además lucen muy tardías.
Ahí tienen por ejemplo al diputado federal GERARDO PEÑA, del mismo clan, que hasta este miércoles emitió un comunicado en el que asegura que se entregó el Estado “a los generadores de violencia”… No, pos guau, como diría cierta parte de los espectadores. Pero el tiro le salió por la culata porque nadie publicó sus señalamientos y horas después los 31 inmigrantes fueron rescatados sanos y salvos. Obviamente, ni CABEZA DE VACA ni su compadre de la bancada panista en la Cámara baja emitirán un mensaje de reconocimiento.
No estamos aquí para justificar el actuar de las actuales autoridades estatales; por el contrario, cuantas veces ha sido necesario puntualizamos que se avanza lento en este tema, pero a diferencia del sexenio anterior ahora sí hay transparencia en la información, la cual fue maquillada y escondida para presumir una supuesta mejoría en materia de seguridad durante el cabecismo. Aquí lo comentamos una y otra vez, por eso vemos con agrado que la información fluya sin contratiempos, para mantenernos informados y continuar en esta labor de espectadores y narradores de la vida pública. Pamba a los panistas que escupe para arriba de lo lindo.
(Por cierto, aprovechamos el espacio obsequiado por El Diario MX para desear que el 2024 sea un año de éxito a quienes queman pestañas leyendo estas líneas. Felicidades.)
APLAUSOS PARA INVESTIGADORES
Mientras estuvimos alejados del teclado unos días para narrar las puestas en escena de Tamaulipas se dio a conocer una historia de éxito bastante interesante. Resulta que estudiantes de la UAT crearon un novedoso biorreactor, que es un dispositivo en el cual se llevan a cabo reacciones químicas que permitan generar productos de interés, tales como medicamentos bioadaptativos o fertilizantes y pesticidas ecológicos, incluso se utilizan para el tratamiento de aguas residuales y hasta en la elaboración de cerveza y el refinado de etanol.
Pues bien, los jóvenes NATALIA PÉREZ MONTELONGO, ÉRICK LARA CARRILLO y MAXIMILIANO ORTEGA RAMÍREZ, de la Unidad Académica Multidisciplinaria Reynosa-Aztlán, junto a su profesor, doctor JUAN DE LA TORRE, crearon este biorreactor, el cual es “particularmente notable por su capacidad para realizar reacciones en tiempo real con una precisión sin igual, lo que aumenta significativamente el rendimiento de la producción de biocombustibles”, señala nuestra Alma Máter al dar a conocer este logro. Vayan pues nuestros sinceros aplausos para mentes tan brillantes de estudiantes tan dedicados.
